Los créditos personales se siguen encareciendo mes a mes y todo apunta a que esta tendencia se mantendrá a lo largo del año afectado por la crisis del Norte de Africa.
Un Euribor más elevado, como se está produciendo en este mes de marzo, encarecerá las hipotecas además de encarecer el tipo de interés que se aplica a los préstamos personales.
Si a todo ello le añadimos el hecho de que las entidades financieras están afectadas por una escasez de liquidez, nos encontramos con una situación de compleja solución en la que tenemos pocos préstamos, y más caros.
Esto llevado al campo práctico quiere decir endurecimiento de las condiciones a la hora de conceder créditos personales y encarecimiento del tipo de interés aplicado.
Esto significa un nuevo retraimiento de la economía arrastrado por la disminución del consumo y la falta de liquidez del ciudadano.
De nuevo el pez que se muerde la cola. ¿Quién pondrá el cascabel al gato?.